Prologo

Si pudiera describir mejor este lugar diría que fue el fondo del abismo, un profundo sentimiento vació sin explicación, como una luz que irradia el color negro, no tenia la claridad y nunca pude ver nada. Recibía inyecciones que me ponían los ojos blancos y solía pasar horas sentado mirando hacia la pared, nunca quise mirar por la ventana en verdad no soportaba ver la mierda que había afuera. Creí que encontré un refugio pero al fin y al cabo no lo era, mi habitación era blanca con almohadones en las paredes y en el suelo, esa habitación tenia una luz de halogeno y era profunda que sentía que le pertenecía a la habitación, así fue el primer mes del año que estuve rehabilitandome para volver a poner un pie afuera, pasaban los días y no sentía la necesidad de volver a un mundo que lo había quitado todo de mis manos, lo que yo mas apreciaba en la vida... pasaban los meses y no hablaba con nadie, nunca lo hice, asumieron que me había recuperado en el proceso. Mi ultimo día ahí hice algo que nunca quise hacer y fue mirar por la ventana, necesitaba ver que había cambiado, era un día de sol parecía tener una buena atmósfera, me pasaron ropas nuevas: un chaleco negro, zapatos negros, unos pantalones negros para variar y una polera blanca, todo básico sin dibujitos ni nada, era como si la personalidad cambiara y en el proceso cambió. Puse un pie afuera del lugar, tenia que irme pero afuera había un hombre esperándome
-Detective lo estaba esperando-
-¿Y quien eres tú?
-Solo venga, lo están esperando en su oficina-